¡Feliz San Valentín! - Cartas de Amor

Hola Campistas! Como sabéis el día 14 fue el día de los enamorados y para conmemorarlo habíamos puesto una actividad en la que escribiríais una carta. Cada una de ellas contaría 100 dracmas. Aquí os las dejo y... 

¡Feliz San Valentín! 


*El retraso de las cartas tiene un motivo, Hermes estaba...... ocupado. No diré más cosas porque puede costarme la expulsión de la dirección del campamento, pero confío en que sus hijos e hijas - que llevan el Olimpo News - sean imparciales también en temas referentes a SU padre ;)



Carta de Esther (Ares)

Hola desconocido/a

Esta carta estaba destinada a perderse. Sí, como oyes, nació sin destinatario y morirá sin él pero eso no significa que no pueda ser leída. Tú puedes hacer que esta carta llegue lejos y que incluso no muera nunca.
San Valentín es una fiesta triste. Es el día en que celebramos el amor, pero eso debería celebrarse todos los días. Es un día triste porque nos centramos en ese día olvidando que el resto del año también queremos y merecemos amor. No lo olvides nunca, no centres tu cariño y tus buenas acciones para este día. Todos los días son importantes. Y San Valentín no debería ser solo para las parejas amorosas, sino que demuestra tu amor a todos a los que quieras.
Sé feliz.

Disfruta del día, sí, pero no olvides los otros 364 días restantes.
Pasa esta carta para que todos aprecien lo que tienen siempre y no solo lo que pasa una vez al año.

Con cariño, ¡Feliz San Valentín!

Esther :3

-Desde Ares. Propagando la guerra y el amor desde el 20000000 A.C.

Carta 1 - Desde Hermes
Dicen que cupido tiene muy mala leche, y tal vez sea verdad. Porque nunca creí que me fuera a enamorar de ti, de alguien tan distinto,  haciendo que me lata tanto el corazón que los hijos de Apolo han comenzado a componer una sinfonía en base a ellos.
Nunca creí que me fuera a enamorar de alguien que hace que las fraguas de Hefesto parezcan hielo en comparación con el ardor que recorre mi cuerpo cuando me rozas sin querer. Ni siquiera creí que fuera a enamorar de alguien que creyera más listo que un hijo de Atenea.
Dicen que no existen los héroes felices, pero yo lo soy. Lo soy cada vez que me sonríes cuando nos cruzamos, lo soy cuando me reservas un sitio a tu lado o lo soy cuando noto tu aroma en el aire (gracias Eolo, gracias por ese pequeño placer).
Espero, sin duda alguna, que no nos ocurra como a Hades y Perséfone. Espero que no sea una granada la que te haga estar a tu lado, ni siquiera una flecha. Espero que seas tu quien decida.
Y, dioses aparte, espero que me digas que sí.
Así que te esperaré en la puerta de la casa de Hermes. Porque quiero demostrar que un héroe puede ser feliz. Y quiero ser feliz a tu lado.
Carta 2 - Desde Hermes

Querido mestizo,

Desde el primer momento en el que te vi sentí la extraña sensación de que la flecha que el maldito de Cupido me había clavado en mi corazón era, extrañamente, una de sus flechas de Amor. Como bien ya debes saber, nunca se puede saber con el pillonzuelo de Cupido si sus flechas son para que empieces a vomitar arco iris o si es para que te enamores de la primera persona que veas, suelen ser de la primera pero conmigo hizo una excepción. Sé que eso no te hará mucha gracia, ya que tu no me conoces y que ni siquiera sabes como soy pero me encantaría quedar un día y que, por fin, lo sepas.

P.D: Por si acaso, no lleves la cartera. No quiero robártela sin querer.

Atentamente,

Elisa, hija de Hermes.

Carta 3 - Desde Hermes

Querida Gema,

Desde que llegué al Campamento, mi vida ha cambiado. Todo es completamente diferente. Diferente para bien. He descubierto que no sólo eres parte de mi familia, sino que también tú y yo tenemos una conexión espacial especial, maldito alcohol (nota mental: no dejar que otros campistas se encarguen de traer de extranjis la bebida, la calidad es más que dudosa). A lo que iba. Ahora que te conozco me pregunto, ¿cómo no habíamos dado la una con la otra antes? No lo sé, pero no importa. Desde que nos encontramos en nuestra cabaña ha surgido algo mágico (esto tiene que ser una carta de amor, ¿verdad?, pues inserta aquí la canción “love is in the air” por ejemplo). Lo que empezó siendo una tontería (tontería en el mejor sentido, no te ofendas jefa… y sí, sé que revisas toda la correspondencia y sí, aunque soy Hija de Hermes, he decidido darte hoy el placer de cotillear esto)… Lo que empezó siendo una tontería de actividad extra para ganar puntos, acabó convirtiéndose en una aventura en el que nuestras niñas, que se han convertido en una parte de nosotras, juntaron sus caminos y convirtieron sus pequeñas historias individuales en un “proyecto” con las miras un poco más altas. Y cuando esto acabe, sigo pensando que tú y yo deberíamos escribir algo más serio juntas. Porque hay feeling entre nosotras (volver inserta aquí la canción “love is in the air”) y yo creo, no, pienso que podemos (sí, claro que podemos) llegar a crear algo impresionante.

Así que desde aquí te declaro mi eterno cariño por estar ahí, por escribir conmigo, por ser la única que me escuchaba cuando estaba dando cuatro voces a una cabaña vacía, por apoyarme y ser mi compañera de batallas y no rendirte nunca en lo que al AcantonamientoCampamento respecta (en serio, nunca dejes que otro se encargue de traer el alcohol).

Con amor, tu pelirroja.

P.D: Devuélveme la carta cuando puedas porque necesito las notas mentales que he puesto ya que mi memoria ya no es lo que era.

La jefa dice:

- No diré nada sobre que reviso la correspondencia sin la presencia de mi abogado divino (de la muerte) 

Carta de Hefesto

Muero por tus huesos y vivo con tus besos, no sabes quien soy pero sé que la diosa Afrodita se ha encarnado en ti; eres bella como Hera, radiante como el carro de Apolo y eres valiente como los hijos de Ares.

No sabes quien soy, pero siempre te he amado desde lejos; te admiro desde que llegasteis al campamento, eres la única de tus hermanas que sabe coger una espada como lo que es un arma de defensa y no como lo que la mayoría piensan. Sabes lanzar flechas que surcan los cielos, corres más que cualquiera de nosotros y eres más astuta que una hija de Atenea.

Eres hermosa y yo soy mugre, mientras a ti te gusta destacar y arreglarte, a mi me gusta encerrarme en fuego y olvidarme de la ducha. Yo solo se arregla chatarra oxidada y tu creas belleza; mientras tú hueles a flores, yo huelo a cenizas y aceite.

Somos incompatibles pero, si nuestros padres pudieron estar juntos y formar lo que nosotros somos, ¿porque nosotros no podemos hacer lo mismo? Se que no soy el príncipe que tu querías, que soy un mero capataz sucio y descuidado; pero yo te puedo dar lo que nadie conseguirá darte nunca. No quiero espantarte, solo quiero decirte que me importas y que te quiero, puede que sea una locura pero es la verdad; no me creas si no quieres, pero cuando te miro siento que me arde el pecho y cuando me miras, siento que me derrito. Te quiero Silenia, hija de Afrodita. Te quiero.

Charlie,

Hijo de Hefesto.